Un cacho de JUSTICIA: Reclusión perpetua para el genocida Von Wernich



Habrás cerrado los ojos. Te imagino bajo la parra con la radio encendida. Pensando en ella. Cargado de años pero sin fatiga en la búsqueda.
Habrás cerrado los ojos. Sin furia, sin pulsión de venganza.
Canoso y encorvado sentado, casi en sombras, con la esperanza intacta.
Y habrás apretado el mate que se enfrío mientras escuchabas.
Y habrás relajado la pierna que te cuesta apoyar y que seguro esta noche te duele un poco más. 
Pero que duele menos ahora, cuando la voz desde la radio te dice que condenan a  ese que te jodió, que te mintió, que te engañó.
A vos que creías en El. O en ellos que, decían , lo representaban a El.
A vos que desde entonces crees mucho menos en El y casi nada en ellos.
Por eso recién abrirás los ojos, imagino, cuando escuchas "perpetua".
Cuando esta justicia del hombre, que escasea tanto por acá, le cae por el lomo casi como un milagro a destiempo.

Entonces tal vez, solo tal vez,esta noche puedas volver a  dormir
De un tirón encontrar el alba.
Como hace tanto que no.
Como desde esa otra madrugada que no.

En la pausa que dá una gota de justicia tal vez puedas imaginar esa sonrisa que hace
29 años buscás. 

2 comentarios:

Unknown dijo...

Pese a este fallo,al hecho de que se hizo justicia, y siendo abogada, no creo en la justicia.
Sin AMIA, sin Embajada, no hay justicia. Cuando se dicto el fallo de AMIA, me dí cuenta que la impunidad se consagraba reina, y caminaba burlonamente por las calles.
Es bueno que comience a buscar su propia fuerza, la tan golpeada justicia...pero acompañada de jueces y abogados tan corruptos, permitime dudar.
Abrazos

Anónimo dijo...

Es una macana. La corporación de jueces y abogados nos está dejando una justicia enclenque y una República con pies de barro donde reina el político con poder mientras lo tiene.
Yo también dudo...
Abrazo

 

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